David
Barguil, representante a la Cámara del Partido Conservador, y Carlos Fernando
Galán, senador de Cambio Radical, insisten en ponerle límite al incremento
anual del impuesto predial unificado que tanto ha afectado a ciudadanos de toda
Colombia.
En ese
sentido, los dos congresistas –que fueron parte del bloque peñalosista en las
elecciones en Bogotá– presentaron un proyecto de ley ya había sido radicado en
abril de este año por los mismos congresistas.
La
iniciativa indica que el aumento en el cobro total del impuesto predial
unificado, producto de actualizaciones catastrales de una vigencia a otra, no
podrá exceder en más de un 50% el monto liquidado por el mismo concepto en el año
inmediatamente anterior.
“Producto
de las actualizaciones catastrales, el impuesto predial que pagan los
colombianos ha aumentado muy por encima de su capacidad de pago, cuyo
crecimiento se ve reflejado en la variación anual del salario mínimo y de la
inflación. Mientras que en los últimos 8 años el salario mínimo creció en
promedio 5,1%; en Bogotá, por ejemplo, el valor catastral de la ciudad pasó de
$121 billones a $447 billones, es decir, creció un 269%. La problemática es a
nivel nacional, pues el crecimiento total de los avalúos catastrales fue de un
76,2% en los últimos 6 años”, explicó Barguil.
En el
caso de las viviendas pertenecientes a los estratos 1 y 2 cuyo avalúo catastral
sea igual o inferior al valor de la vivienda de interés social, es decir, 135
salarios mínimos mensuales legales vigentes, el incremento anual del impuesto
predial no podrá sobrepasar en dos veces el aumento porcentual del salario
mínimo determinado por el Gobierno Nacional para esa vigencia.
Esta
regla también está prevista en el caso de los predios residenciales urbanos
cuyo avalúo catastral supere el 70% de su valor comercial. Esto bajo el
entendido que los contribuyentes de estos predios, con avalúos catastrales de
valor cercano al comercial, ya vienen asumiendo una carga tributaria
comparativamente mayor que la que otros propietarios asumen.
“Estas
dos reglas buscan proteger a los colombianos más pobres y los contribuyentes
que ya vienen asumiendo una carga demasiado alta por el valor de los avalúos
catastrales que tienen sus predios”, concluyó Galán.
Tomado
de www.elespectador.com