Uno de cada diez hipotecados en España está atrapado en una vivienda que vale menos que el préstamo que le queda por pagar. La proporción se elevará hasta el 10,7% en 2014 y llegará al 11,3% en 2015. Esto significa que, al menos, 580.000 propietarios perderían dinero en caso de querer venderla y serían carne de desahucio si el deterioro de su situación financiera les impidiera hacer frente a las mensualidades hipotecarias. Así lo asegura un estudio realizado por la web de ahorro Kelisto.es en colaboración el Centre of Economics and Business Research (CEBR) londinense.
Las principales causas de esta situación han sido el deterioro de la economía, la debacle del mercado laboral, y las condiciones restrictivas de acceso al crédito tras el estallido de la burbuja financiera. En el caso concreto del sector vivienda, ha influido el descenso de la demanda de vivienda e hipotecas, que ha caído en más de un 20% desde los máximos previos al estallido de la burbuja. Aunque, sin duda, la causa más importante de la formación de hipotecas burbuja ha sido el desplome de los precios. El precio medio de la vivienda ha caído un 38,5% desde máximos y, según el portal Kelisto, el deterioro va a continuar y caerá un 15,8% en los dos próximos años. Con estas previsiones, el número de hipotecas burbuja se incrementará durante los dos próximos años hasta los 710.386, es decir un 22% más que en este momento.
El impacto económico de esta situación, la diferencia entre los importes de esas viviendas y los préstamos pendientes de pago, es de 13.000 millones de euros. Esto implica una media de 22.000 euros por familia afectada. El deterioro en los próximos años será muy significativo, según Kelisto, y la brecha superará los 20.000 millones de euros (un 52% más) en 2015, lo que supone que la deuda de cada familia afectada será superior a los 27.000 euros.
Por comunidades autónomas, el mayor número de hipotecas basura se concentra en Cataluña y Madrid. Fue en estas dos zonas donde más subió el precio de la vivienda antes del estallido de la burbuja inmobiliaria y también donde más hipotecas se firmaron. Por el contrario, Ceuta, Melilla y Extremadura son las comunidades menos afectadas por este problema.
Qué pueden hacer los afectados
“La situación es muy complicada y en muchos casos ni siquiera habrá solución. Pero no hay que darse por vencidos”, advierte Estefanía González, portavoz de este portal dedicado al ahorro.
Las posibilidades de actuación dependen de las necesidades de los propietarios.
1. Para los que pueden seguir pagando las cuotas. Una posibilidad es amortizar anticipadamente. Para ello, hay que hacer muchas cuentas antes ya que habrá que pagar comisiones y también valorar si el dinero ahorrado está disponible o por disponer de él hay que asumir alguna penalización. En este caso, también es posible no hacer nada y esperar a la recuperación de los precios o el final de la hipoteca.
2. Quienes a pesar de poder pagar sus cuotas mensuales se vean en la obligación de vender. “En este caso, la mejor opción es tratar de remodelar la vivienda y diferenciarla del resto de la oferta de la zona para conseguir incrementar su precio y hacerla más atractiva”, aconseja González.
3. Los que no pueden hacer frente a las cuotas son los que menos margen de actuación tienen. La primera opción es alquilar la vivienda. Siempre que los ingresos que se obtengan por ello permitan pagar la hipoteca y los gastos derivados de ir a vivir a otro lugar. También se puede intentar conseguir la dación en pago del banco y, como última posibilidad, está la opción de vender y asumir el saldo negativo.
Tomado de eldiario.es